En algunos mercados de México los precios de algunos alimentos no dan tregua, como es el caso del kilo de aguacate que se vendió hasta en 140 pesos, el kilogramo de pechuga de pollo llegó a ubicarse hasta en 167 pesos, mientras que el kilo de huevo blanco se ofertó hasta un máximo de 52.50 pesos en ciertas zonas del país.
“El aguacate subió porque terminó la cosecha, y sigue la demanda. En cuanto a la pechuga de pollo, fue influenciado por el aumento de precio en Estados Unidos por la problemática de la influencia aviar que está afectando y está aumentando. El huevo blanco, el precio pagado al productor presentó un aumento en los últimos meses”, aseveró el titular del Grupo Consultor de Mercados Agrícolas (GCMA), Juan Carlos Anaya.
Lo anterior, a pesar de que hace unos días el gobierno federal lanzó el Paquete Contra la Inflación y la Carestía (Pacic), con el que se busca contener el precio de 24 productos de la canasta básica entre ellos el huevo y el pollo entero, que se vende en piezas por separado en muchos lugares.